¿Alguna vez te has planteado la esterilización de tu perro? Es una decisión que no se puede tomar a la ligera, y que debemos tener clara desde el principio. Si quieres que tu perro críe quizá debas hacerlo una vez tenga la camada, pero si no quieres cruzarlo la esterilización es la mejor opción para evitar embarazos no deseados, además de otras ventajas para la salud de tu can.
Más allá del problema que suponen las camadas no deseadas, uno de los principales beneficios de la esterilización del perro es que se reducirán de manera importante las posibilidades de que tu perro o perra sufra infecciones o cánceres en sus genitales o en la próstata a lo largo de su vida. De hecho, los machos esterilizados también tienen menos problemas de próstata, en especial cuando se hacen mayores, y será más difícil que se orinen encima.
También hay otras ventajas de la esterilización del perro relacionadas en cambios en el comportamiento del animal. Al aminorar su instinto sexual los perros son más sociables con otros machos, al no verse unos a otros como competidores por las hembras. También se mostrarán menos agresivos y estresados, una mejora en su calidad de vida que muchas veces hace que aumente su esperanza de vida. Como no tendrá que marcar el territorio en vuestras salidas notarás que orina menos. Aunque en estos casos también es importante conocer algunas de las desventajas de esterilizar a tu perro asociadas con la orina antes de que tomes la decisión.
Otra de las consecuencias de la esterilización canina es que el perro verá reducido su impulso por montar a otros perros o personas, algo que puede llegar a ser muy molesto para sus dueños. Por último, al no tener el mismo instinto sexual que satisfacer, los canes tendrán menos tendencia a escaparse en busca de un macho que las monte o de hembras en celo, según el caso. Así es más difícil que el perro se pierda, al menos porque se escape siguiendo sus instintos sexuales.
