¿Cómo bañar a un perro que es muy grande?
Una de las cosas que más aterrorizan a algunos perros es el baño. Es una batalla constante entre los perros y sus dueños, que a veces los bañan con más frecuencia de la necesaria. Según el perro, la vida que lleve o el pelaje que tenga, tendrás que ducharlo con más o menos frecuencia. El drama es todavía mayor cuando se trata de un perro grande, así que vamos a ver una serie de consejos para bañar a los perros más grandes en casa.
Lo primero de todo será educar al perro grande para bañarlo, que se acostumbre. Puedes empezar a bañarlo a las 5 semanas, que se habitúe desde cachorro. Si llega a casa crecido que se familiariza con la bañera. Igual que con el coche, deja que entren en la bañera -sin agua-, la inspecciones y cuando se porte bien prémialo con una golosina. Lo mismo cada vez que lo duches, de forma que tu perro asocie la ducha a algo bueno, premio incluido.
Elige bien el sitio. Si cabe en la bañera y puedes maniobrar, es el lugar ideal. Si hay que hacerlo al aire libre, compra un adaptador para que salga agua caliente. Para evitar que tu perro se escape cuando le duchas, puedes utilizar la correa -de materiales como el nylon, que pueden mojarse-. Pide ayuda a alguien para que lo sujete. Piensa que al tener más pelo necesitarás más tiempo para limpiarlo y cepillárselo, y necesitarás instrumentos acorde al tamaño del can.
Por lo demás, la ducha de un perro grande no guarda muchas diferencias con la de un perro de tamaño pequeño. Lo ideal sería lavarlo de abajo hacia arriba, limpiando bien las patas. Recuerda que lo primero que hará tras salir de la ducha será sacudirse el agua para secarse, por lo que lo pondrá todo perdido. Busca un lugar para que lo haga. Si no tienes espacio para duchar a un perro muy grande, siempre lo puedes llevar a una peluquería o en el veterinario.