Ya sea porque tu perra acaba de tener una camada o porque has adoptado un perrito, si tienes un cachorro en casa seguro que has experimentado el temor a los parásitos en el perro. Pueden complicarle mucho la vida al can, así que si sospechas que tu cachorro tiene parásitos deberías llevarlo cuanto antes al veterinario. Los síntomas de los parásitos son los mismos para cachorros y perros adultos, aunque vamos a repasar los más habituales. Además, matenerse correctamente informado sobre la desparasitación de los perros y llevar un seguimiento de la misma te ayudará en gran medida a que tu perro evite algunas de las enfermedades relacionadas con los parásitos más habituales.
Empezamos por los parásitos externos, los más fáciles de identificar ya que saltan a la vista. Las pulgas, las garrapatas y los ácaros de la sarna son los más habituales, pero también pueden ser chinches, piojos, la mosca negra o los mosquitos. Notarás que tu cachorro los sufre porque se rascará continuamente y de forma brusca. El picor intenso es un síntoma común a todos los parásitos externos, y el veterinario te recomendará el tratamiento más adecuado.
Respecto a los parásitos internos, el picor es otro de los síntomas más claros. Notarás que el cachorro se arrastra sentado para rascarse su zona anal, y en los casos más extremos hasta habrá sangre en sus heces. A veces podemos ver los parásitos a simple vista junto a esas heces, y también es fácil que pierda peso -el parásito se lleva los nutrientes- aunque los gases generados por el gusano harán que se hinche su estómago.
La edad del perro será clave a la hora de definir un tratamiento. Piensa que estamos hablando de cachorros, perros cuyo sistema inmune se está desarrollando y que tienen las defensas muy bajas así que no puedes ofrecerles el mismo tratamiento antiparasitario que a los perros adultos. Estos tratamientos son muy tóxicos para los cachorros, y pueden empeorar la situación. Por esa misma razón los cachorros tardan unas semanas en vacunarse y toman unos productos antiparásitos diferentes, así que al menor síntoma pide cita con el veterinario.