El calendario de vacunación es la mejor guía para saber cómo y cuándo vacunar a tu perro pero hay que tener en cuenta que se trata de un calendario orientativo y que debe ser el veterinario quien te aconseje sobre la mejor manera de aplicar estas medidas de salud preventiva.
El hecho de saber cómo vacunar a un perro, depende de las características específicas de tu mascota. Algunos parámetros que debes tener en cuenta son:
- La edad del perro. No es lo mismo un cachorro que un perro adulto o uno muy mayor (que requiera cuidados específicos).
- La raza. Algunas son más proclives que otras a contraer enfermedades concretas.
El lugar de residencia, porque hay zonas de riesgo para determinadas infecciones, por ejemplo, el caso de la leishmaniasis. Si vives en zonas húmedas y calurosas con presencia de mosquitos, la vacuna será prioritaria. De igual modo que sucederá con el contacto que el perro tenga con otros animales e incluso, si pasa la mayor parte del tiempo en casa, si sale con frecuencia, si vive en el campo etc.
El estado de salud del perro antes de la vacuna
En el momento que has decidido vacunar ha tu perro tu mejor amigo tiene que estar completamente sano y desparasitado. En el caso de los cachorros, lo habitual es que la vacunación se inicie entre la 6ª y la 8ª semana de vida.
Debes empezar con las vacunas esenciales, entre ellas: moquillo, parvovirus, hepatitis o leptospirosis. Ten en cuenta que, en estas primeras vacunas, las dosis son mínimas, por lo que, en las semanas posteriores, tendrán que recibir una segunda o incluso tercera dosis. Es importante no interrumpir y completar el proceso de vacunación para lograr que el perro quede realmente inmunizado.
También es fundamental no olvidar los refuerzos anuales necesarios para mantener la efectividad de las principales vacunas, entre ellas la rabia. Por último, una situación determinada, puede requerir una vacuna no prevista. Por ejemplo, si vas a dejar a tu perro en una residencia, lo más aconsejable (y tal vez te exijan) es vacunarlo contra la “tos de las perreras”. En estos supuestos, actúa con suficiente antelación y pide consejo a tu veterinario sobre el método idóneo de proceder.
