Cómo se deben vaciar los sacos anales
Algunos perros son incapaces de vaciar las glándulas o sacos anales por sí solos, lo que hace que muchas veces caminen arrastrando el culo por el suelo, con la cola baja o que incluso se nieguen a andar por culpa del dolor que sienten. Si también es el caso de tu perro, tú mismo puedes vaciar los sacos anales apretando, aunque conviene tomar una serie de precauciones. Si no lo haces, las glándulas anales son una zona muy sensible por lo que el perro puede sufrir serias consecuencias.
Lo primero que debes hacer es tranquilizar al perro -y tú mismo-. En cualquier caso, conviene que haya una segunda persona aguantándolo. No olvidemos que éste es un proceso muy importante en la salud de tu perro por lo que con ayuda de alguien conseguirás que no se siente cuando empecemos a intervenir. Tras ponerte unos guantes de látex deberías introducir una gasa en el ano del perro para evitar que la secreción de los sacos anales salpique. Los sacos anales están justo en la en la parte inferior de la apertura anal.
Para vaciarlas, tan solo tienes que apretar ambos lados del área anal del animal. El líquido no será muy espeso, y el proceso puede dolerle algo al animal. De hecho, no deberías repetir el proceso. Si tras apretar los sacos anales del perro ves que estas glándulas todavía contienen líquido, deberías limpiar la zona con delicadeza. Piensa que estas glándulas sirven para que el can envíe señales olfativas a otros animales, así que el mal olor al apretar los sacos anales está más que asegurado.
Si ves que no consigues vaciar las glándulas, lo mejor que podéis hacer es ir al veterinario. Puede incluso que el perro tenga una infección en los sacos anales por lo que un especialista será siempre tu mejor ayuda. También, muchas veces se recomienda apretar los sacos anales una vez al mes para vaciarlos, aunque a la hora de la verdad depende del líquido que haya acumulado el perro desde el último vaciado de glándulas y podremos esperar unas semanas más. El perro habrá pasado por una situación dolorosa, así que cuando le hayas vaciado los sacos anales puedes recompensarlo con un premio.
Y si todavía necesitas consultar más información porque te preocupa la salud de tu mejor amigo, también deberías saber cómo se limpian los sacos anales para que completes este proceso con total seguridad.