¿Es necesario vaciar los sacos anales de un perro?

Normalmente, los sacos anales de un perro se vacían de forma natural, ya que es algo que hacen ellos mismos cuando expulsan las heces de su cuerpo, cuando desean marcar territorio o cuando se sienten amenazados o en una situación de estrés o nervios, por lo tanto no debemos ser nosotros quienes forcemos esta situación. Los problemas en los sacos anales son muy delicados para nuestros perros y más todavía si ellos mismos han decidido no vaciarlos.

Por otra parte, existen situaciones en las que las mascotas, por problemas en sus sacos anales situados a los dos lados del ano, no pueden expulsar esta sustancia al exterior, por lo que es muy probable que se les hinchen y necesiten de una ayuda extra para vaciarlos. En este momento si que es necesario vaciar los sacos anales de un perro, ya que ellos mismos no son capaces de hacerlo por sí mismos y de lo contrario podría derivar a otros problemas de salud relacionados con la inflamación de su barriga e incluso más graves. A partir de ese momento, si la mascota presenta un problema continuado, deberemos tener en cuenta cada cierto tiempo que hay que hacer un vaciado de las glándulas anales. No olvidemos tampoco que los sacos anales del perro tienen una función determinada y una acumulación excesiva puede ser motivo de rotura o fisura, lo que puede desencadenar un problema mayor.

¿Cómo vacíar los sacos anales de un perro?

Esta tarea puede resultar un poco desagradable pero, si no sabes cómo vaciar los sacos anales de los perros, siguiendo un procedimiento y tomándolo como un hábito es posible que nos acostumbremos. Tomando las medidas necesarias de higiene no nos ensuciaremos extrayendo este líquido de los sacos anales cuando ellos mismos no pueden hacerlo. En caso de que no podamos hacerlo, podemos pedir ayuda a un profesional o llevarlo cada cierto tiempo al veterinario para que examine a nuestro perro y le vacíe él mismo los sacos anales. Para hacerlo bastará con ponernos unos guantes y tener a mano unos pañuelos, de modo que iremos apretando suavemente sobre los sacos anales y veremos como va saliendo este líquido de su interior.