Mi perro se ha perdido, ¿qué hago?
Nunca debería pasar, pero más de una vez un perro se ha escapado o se ha perdido. Son momentos dramáticos, de mucha angustia para unos dueños que no saben cómo reaccionar. Un descuido tonto, un despiste o las propias ganas de jugar del perro, que se da a la fuga pueden acabar con el animal suelto y contigo paralizado por la impotencia y el no saber qué hacer. El chip puede ser vuestro salvavidas, aunque lo primero es denunciar la desaparición de tu perro.
Uno de los primeros pasos para recuperar a nuestro perro perdido vendrá dado por nuestro instinto, que nos hará dejarnos la voz llamándolo por la zona en la que ha desaparecido, le preguntaremos a todos los vecinos y transeúntes si lo han visto, etc. Puede funcionar, como también puede ser que el perro vuelva a casa al cabo de unas horas, siguiendo el rastro del olor; pero tras una primera búsqueda -muchas veces apresurada- conviene denunciar ante la policía la desaparición del perro. Aunque también lo puedes hacer ante el veterinario si tu perro lleva chip, por ejemplo.
De esta manera, si alguien se encuentra con el perro y lo devuelve podrán identificarlo. Lo mismo pasa si le pones una placa identificativa con el nombre de tu perro, el tuyo y un teléfono de contacto. Además, en caso de denuncia te puedes cubrir las espaldas en caso de que el perro se muestre agresivo o actúe mal si lo han robado -aunque si se ha escapado y muerde a alguien tú eres el responsable-. Así, también te evitas que te denuncien por abandono.
La cosa se complica cuando el perro no lleva el chip o la placa que lo identifique, o si se ha fugado sin ellos. Además de poner la denuncia correspondiente, no tendrás más remedio que recorrer la zona con una foto, preguntando por él a los vecinos, o empapelar la ciudad con fotos suyas, una descripción y un teléfono de contacto con la esperanza de que si alguien lo encuentra te avise para el esperado reencuentro.