¿Por qué mi perra tiene gases tras el parto?
Uno de los momentos más especiales en la vida de nuestra perra es cuando tiene los cachorros. La llegada de una camada a casa nos hará disfrutar todavía más de ella, pero también supone cambios importantes, tanto para nosotros como para la perra. Uno de los cambios tras el parto y de los más significativos es el de la alimentación de la perra, que a veces puede producirle gases; unas flatulencias que seguramente te preocupen y despierten un montón de dudas en tu cabeza, pero es normal incluso que tu perra tenga diarrea tras el parto.
Lo primero que debemos tener claro es la causa de esos gases, que en la mayoría de casos está en la comida. Debes tener en cuenta que la perra come por ella y por los cachorros que se alimentan a través de la leche materna, por lo que tendrá que cambiar la dieta. Estos cambios no siempre les sientan bien a los animales, y uno de los efectos más habituales son las flatulencias. También puede ser que la mayor presencia de nutrientes como la fibra o los hidratos de carbono provoquen los gases.
Por suerte tenemos varias formas de prevenir los gases, por ejemplo ofreciéndole a la perra un pienso de gama alta. Cuanta más calidad tenga el alimento más fácil será que el animal lo digiera, y la perra tendrá menos gases. Algún problema respiratorio, problemas en el hígado o los parásitos intestinales también pueden manifestarse en forma de gases, aunque ahí es el veterinario el que te recomendará el tratamiento ideal para evitarlo.
A veces las flatulencias se transforman en diarrea, pero hay que ir con cuidado ya que a veces, tras el parto, se comen las placentas de los recién nacidos. También hay que tener en cuenta el gran esfuerzo que ha hecho el animal, que muchas veces le provoca un estrés que se manifiesta en forma de gases y diarrea. Si en la diarrea no hay sangre y no dura más de dos días no pasa nada, entra dentro de la normalidad, pero si la situación de prolonga deberías acudir al veterinario.