¿Por qué mi perro gime?

A veces el comportamiento del perro nos deja descolocados, ya que no sabemos si se trata de algo normal en los canes o si es el primer síntoma de que pasa algo no muy bueno. Uno de los mejores ejemplos de comportamientos difíciles de interpretar son los gemidos de los perros, que pueden tener dos interpretaciones diferentes: o el perro intenta llamar tu atención o detrás del gemido hay un dolor o una enfermedad, y nos avisa de que tiene un problema.

En el primer caso, cuando gime para llamar nuestra atención, podemos estar ante varias situaciones. Las más habituales, que el animal esté aburrido o que te vea comer y te pida algo. La ansiedad por separación del perro cuando estás lejos o si el perro se siente encerrado también se traducen en gemidos, lo mismo que si está en la calle y quiere entrar en casa o lo contrario, quiere salir para hacer sus cosas, jugar, etc. Un gemido es la mejor forma de llamar tu atención.

Por otra parte, cuando los gemidos del perro sean de dolor no serán el único síntoma, sino que también puede experimentar una pérdida de apetito, sueño excesivo o un cierto aislamiento. También es fácil que no tenga los mismos ánimos de siempre, o que el can se quede mirando al horizonte, con la vista fija e incluso algo perdida. Si es el caso, la respuesta y la solución al problema del animal está en el veterinario, él te dirá paso a paso qué debes hacer.

Por qué mi perro gime cuando lo acaricio

Hay veces en las que el perro también gime cuando lo acariciamos. Lo más fácil es que sea su forma de agradecernos esas caricias, de demostrar que es feliz; pero si el gemido es algo agresivo la cosa cambia. Puede ser que padezca una irritación en la piel y acentúes el dolor al acariciarlo, o que haya algún conflicto entre vosotros y rechace tu cariño, aunque aceptará las caricias de otras personas.