¿Qué hacer si un perro muerde a otro perro?
Es relativamente normal que dos perros se desafíen, se reten, se gruñan enseñando los dientes... pero siempre hay que intentar evitar una pelea entre canes en la que alguno de los dos pueda acabar recibiendo una mordedura del otro.
Si pese a tomar las debidas precauciones se produce la pelea, intenta mantener la calma aunque no siempre resulte sencillo y haz dos cosas fundamentales:
- Recaba (y ofrece) toda la información posible sobre el estado de salud del animal (agresor y agredido). Son muchas las enfermedades que se contagian entre perros a través de una herida en la que sangre y saliva se entremezclan (entre ellas la rabia). Si es tu perro el que resulta mal parado, es importante conocer los datos sanitarios del animal que le ha mordido. Si es el tuyo el agresor, ofrece la información de la que dispongas
- Haz una primera evaluación de las heridas que presente tu mascota. Arañazos en los ojos o en la boca, profundidad de las posibles mordeduras, laceraciones, sangrado y hemorragias, pérdida de conocimiento…
¿Debo ir al veterinario si han mordido a mi perro?
La decisión de acudir o no al veterinario siempre va a depender de la gravedad que presenten las heridas, sobre todo de la profundidad de la mordedura pero, en general, siempre es recomendable hacerlo, porque pueden existir daños internos que tal vez no aprecies a simple vista.
Ante una mordedura de otro perro hay que lavar la herida con agua o suero fisiológico cuando sea posible y siempre que no se presente un sangrado abundante y difícil de controlar. Si hay hemorragia, lo que tienes que hacer es intentar taponar la herida, presionando con una gasa o paño limpio mientras vas, inmediatamente, a una clínica donde el perro pueda recibir la atención urgente que necesita.
Presta especial atención si el mordisco se ha producido en la zona del cuello o en alguna otra que pudiese llegar a afectar a algún órgano vital (abdomen). Tras una primera revisión, acude al veterinario para realizar las curas pertinentes, dar puntos de sutura, aplicar vacunas preventivas en caso necesario y establecer un tratamiento que permita la rápida recuperación de tu mascota.