Muchas veces hemos visto a los perros acompañando a los cuerpos y fuerzas de seguridad en tareas de todo tipo, desde búsqueda de supervivientes en catástrofes hasta controles en busca de droga, o buscando dinero oculto en alguna intervención por corrupción. La vida profesional de estos perros policía es corta, y cuando un perro policía se jubila todavía tiene unos años por delante, ¿nunca te has preguntado que pasa con estos agentes retirados? Pues bien, la adopción del can, es una de las mejores soluciones para cuando llega este momento.
Lo ideal sería que se los perros policía se quedasen con su guía, pero no siempre es posible encontrarles este acomodo. A veces se buscan alternativas, e incluso hay perros policía que prestan uno o dos años más de servicio de lo que deberían ante la imposibilidad de encontrarles un acomodo. ¿Existe la posibilidad de adoptarlos? En efecto, sí se puede adoptar a un perro policía jubilado aunque su adopción es algo distinta a la adopción de cualquier otro perro que adoptemos en una protectora.
Precisamente uno de los grandes hándicaps de los perros policía retirados es el tipo de razas de perros policías, porque son perros de mayor tamaño o por ejemplo puede que el perro necesite un mayor espacio, y no todas las personas pueden darle al perro esa calidad de vida.
Otro factor que influye para adoptar a un perro policía es la edad. No todo el mundo está dispuesto a quedarse con un perro de 8 o 9 años, prefieren un cachorro o un perro bastante más joven que les acompañe más años a lo largo de su vida. Por eso, uno de los principales consejos para adoptar a un perro policía jubilado es acudir a una de las asociaciones que promueven la adopción de perros policía retirados, pero también de perros bomberos o del ejército jubilados. Puede que al principio parezca complejo, pero por ello, hay que pensar en uno de los principales motivos para a adoptar a un can, y es que le estaremos dando una segunda oportunidad.
Hay que destacar que son organizaciones privadas, al margen de Interior, Policía Nacional o Guardia Civil, lo que denota el poco interés de estos cuerpos por el futuro de sus perros jubilados. A la hora de ofrecer un perro, ofrecen un cuestionario que los interesados deben responder para encontrar a la familia ideal y asegurarse de que los adoptantes cumplirán con las necesidades del can, por ejemplo el espacio, y de esta manera dejar al agente canino en buenas manos.