Mala digestión
Dolor abdominal, falta de energía, diarrea, gases, sensación de hinchazón entre otros muchos son los síntomas de una mala digestión que puede padecer nuestro perro si no tomamos ciertas precauciones.
Si nuestro mascota va a realizar una actividad física importante deberemos darle de comer unas tres horas antes pero muy poca cantidad. Cuando haya descansado y calmado le daremos el resto de su ración correspondiente. Durante todo el periodo de trabajo debe tener agua fresca (no fría), pero no debe atiborrarse justo antes del ejercicio.
Si el perro se marea, nunca hay que darle chocolate porque puede ser tóxico para él, evitaremos esto dándole un pequeñas cantidades de pienso de forma periódica. Por otra parte si sobrealimentamos a nuestro perro también puede sufrir una mala digestión. En los envases de la comida nos detalla la cantidad de comida acorde con la edad, la raza y el peso, debemos seguir las instrucciones si no queremos que nuestro perro tenga problemas de salud.
Si la mala digestión es algo habitual puede tener efectos a largo plazo por la mala absorción de los alimentos. En este caso debemos acudir al veterinario.