Malamute de Alaska

Carácter de los Malamute de Alaska

Excepcionalmente amistoso con las personas, si hay algo que propio del carácter de los Malamute de Alaska es que no se suelen llevar bien con otros perros. Esta raza de perro, a pesar de tener un aspecto intimidante por su gran tamaño, no es recomendable si lo que buscas es un perro guardián.

Cuidados de los Malamute de Alaska

El denso y áspero pelaje del Malamute de Alaska hace que sea necesario cepillarlo dos veces a la semana. El malamute de Alaska tiene caída de pelo estacional mudando su pelaje, especialmente el entrepelo, dos veces al año.
No es necesario bañarlo, pero sí que es recomendable utilizar de forma ocasional, especialmente en climas secos y más calurosos, un champú seco.

Ejercicio y alimentación de los Malamute de Alaska

A diferencia de otras razas de perros, los Malamute de Alaska necesitan hacer ejercicio con frecuencia además de que la intensidad del mismo sea intensa. Necesitan espacio, por lo que no está recomendado que vivan en espacios cerrados o demasiado pequeños.
Respecto a la alimentación, hay que cuidar lo que come y la cantidad que come, ya que esta raza de perro tiende a tragarse todo lo que se pone a su alcance.

Problemas de salud de los Malamute de Alaska

Entre las enfermedades más comunes que padecen los malamutes de Alaska están la displasia de cadera, diferentes problemas oculares o trastornos de la coagulación de la sangre. También es propenso a la obesidad y al meteorismo si se le deja comer demasiado, por lo que es importante cuidar los alimentos para perros que come.

Historia de los Malamute de Alaska

Originario de la zona artíca, el malmute de Alaska ha sido tradicionalmente un perro de trineo. De hecho, es una de las razas más antiguas dentro de las familias de los perro de trineo de las que se tiene constancia.
Capaz de cargar con gran cantidad de peso (hasta 40 kg), durante largas distancias, debe su nombre a una tribu nómada Inuit propia de Alaska, los malamute. Los cachorros de la raza Malamute de Alaska son muy juguetones y traviesos. Sin embargo, se trata de un tipo de perro que crece muy rápido y en muy poco tiempo. Generalmente, con tan solo año y medio, el malamute ha crecido por completo, pero sí que siguen aumentando de peso (hasta los dos años). Entre los cuidados de un Malamute cachorro destaca el especial ojo que hay que tener con la alimentación, ya que una sobrealimentación no beneficia a su crecimiento normal. La comparación entre los malamutes de Alaska y los Husky Siberiano es muy frecuente, no sólo por su apariencia, sino también por su origen y su uso. Ambas razas de perro se han utilizado tradicionalmente en zonas de frío como perros de trineo para conseguir transportar por la nieve cargas y personas. Sin embargo, existen importantes diferencias entre ambas razas de perros nórdicos. Los malamute son originarios de Alaska, mientras que los Husky son procedentes del noreste de la región que les da nombre, Siberia (Rusia).  Los malamute son más grandes y menos rápidos que los Husky, además de que ambos perros tienen un carácter diferente: los husky son mas traviesos y activos, mientras que los malamute son más tranquilos y afectuosos con las personas.